Corrían
los años 30 y la Metro-Goldwyn-Mayer
tuvo una arriesgada e insólita idea, reunir en una misma película a las grandes
estrellas de la productora. Para ello, compraron los derechos de la novela homónima
de la escritora austríaca Vicki Vaum.
La película fue dirigida por Edmund
Goulding y obtuvo el premio Oscar a la mejor película.
Se
trata de un drama coral, con ciertos momentos cómicos, en el que se entrelazan
las historias de los personajes que se alojan en el mejor hotel de Berlín. El
barón Félix Von Gaigern (John Barrymore)
que se dedica a robar para pagar sus deudas. Un contable, Otto Kringelein (Lionel Barrymore, hermano del anterior),
que decide disfrutar de sus últimos días gastando todos sus ahorros. La famosa
bailarina Grusinskaya (Greta Garbo),
que actúa en la ciudad. Una joven secretaria, Flaemmchen (Joan Crawford), con aspiraciones de actriz. Preysing (Wallace Berry), un arrogante y mal
educado hombre de negocios. Y finalmente, el Dr. Otternschlag (Lewis Stone), un veterano de la Primera
Guerra Mundial residente permanente del hotel.